Turismo inclusivo
Es necesario aplaudir la inauguración de la primera playa y pueblo incluyentes de México, en Cuastecomates, Cihuatlán, Jalisco, en donde ahora personas con alguna discapacidad motriz o necesidad especial podrán disfrutar un destino de playa como cualquiera de nosotros lo hacemos.Este tipo de destinos atienden a un importante segmento del mercado turístico, conocido en el mundo como “turismo accesible” y mejor llamado, “turismo inclusivo”, porque incluye instalaciones, productos y servicios dirigidos a todas las personas, sin importar el tipo de limitación física o edad, y con la asistencia de personal calificado para que quienes requieren ayuda temporal o permanente puedan funcionar y disfrutar la vida dignamente y sin mayores problemas.Habilitar una playa y un poblado entero para convertirlo en un destino inclusivo no es cualquier cosa.Requiere de además de las características físicas de accesibilidad, otro tipo servicios especializados que normalmente no existen en los destinos turísticos tradicionales.
De acuerdo con la ENAT (European Network for Accessible Tourism) el turismo accesible o inclusivo, es aquél que brinda soluciones a los distintos problemas que enfrentan los viajeros con alguna discapacidad.
El problema mas obvio que deben resolver los destinos turísticos que aspiran a convertirse en destinos inclusivos, es el de la inaccesibilidad, o accesibilidad parcial (solo imaginen lo que se requiere para poder entrar y salir del mar en silla de ruedas). Sin embargo hay otros no menos importantes que igual deben solucionarse, como la ausencia de transporte marítimo, terrestre y aéreo habilitado para todo tipo de usuarios; falta de personal preparado para atender personas con alguna discapacidad; falta de actividades y atractivos, que permitan ser disfrutados por todos; sistemas de reservaciones, websites y mercadeo especializado, etcétera.
El mercado del turismo inclusivo es enorme, y lejos de verlo como un problema que toca resolver a los gobiernos, habría que verlo como una importante oportunidad de negocio para el sector turístico.
Para empezar, la situación laboral de las personas que conforman este segmento del mercado colaboran a la “desestacionalización” de la demanda, ya que muchas de ellas -por ejemplo las de tercera edad- pueden vacacionar en fechas distintas a la mayoría de los vacacionistas, es decir en temporadas bajas.
Se estima que el tamaño de éste mercado en el mundo es de 1.3 billones de personas, y al sumar los familiares y amigos (normalmente no viajan solos) el mercado aumenta a 2.2 billones, que en conjunto controlan la friolera de 8 trillones de dólares anuales disponibles para gasto recreativo.
McKinsey, la consultora estratégica global, estima que la generación de los “baby boomers” (los nacidos entre 1946 y 1965) controla casi el 60% de la riqueza de los Estados Unidos, y que para el 2020, 40% de ellos se retirarán con algún tipo de discapacidad.
Hay que tomar en cuenta además que la esperanza o expectativa de vida promedio ha aumentado considerablemente (Europa 78.4 años
América del Norte 77.6 años, Latinoamérica de 71.5 años) por lo que existe un número cada vez mayor de abuelos que viajan.
Dos curiosidades al respecto: es falso que antiguamente, los seres humanos eran ancianos a la edad de 40 años. Una esperanza de vida de 40 años puede deberse a que la mitad de la población muere al nacer o en su primer año de vida (lo cual es razonable pensar que ocurría en la antigüedad) y la otra mitad muera a los 80 años.
Estas estadísticas son fuertemente influenciadas por factores como los avances médicos, la higiene, o inclusive las guerras, aunque actualmente se refieren únicamente a personas que tienen una muerte no violenta. Es obvio que la expectativa de vida de un narcotraficante es menor al promedio, y la probabilidad de morir en un accidente automovilístico es mucho mayor en las ciudades que en el campo.
“Se le llama esperanza de vida a la edad promedio de las muertes”. Yo.