¿Arte?
Hace unos días, un par de jóvenes hicieron un interesante experimento en el Museo de Arte Moderno de San Francisco.Luego de cuestionarse la simpleza y valor artístico de algunas de las instalaciones del museo, que incluían unos animales disecados sobre una cobija, el joven colocó estratégicamente en el piso de una de las salas un par de lentes, como si fuera una mas de las obras exhibidas en el museo. Unos momentos después los visitantes comenzaron a rodear la "obra de arte", observarla, opinar acerca de ella y hasta tomarle fotos, preguntándose si la intención del artista fue "ver la vida a traves de un lente", o si el título de la obra debiera ser "miopía" o "real eyes / real lies".
Los jóvenes grabaron el experimento y lo subieron a las redes sociales, haciendo de este evento una especie de obra de arte en sí misma, que sirvió para detonar un debate acerca del valor artístico del llamado "arte conceptual" y para probar la teoría de que la gente se quedará mirando, y comenzará a darle interpretaciones artísticas a cualquier cosa, siempre y cuando ésta se encuentre dentro de una galería de arte.
Seguramente usted, como yo y muchos más, al recorrer alguna exposición en famosos museos de arte contemporáneo se ha preguntado porqué llega a valer millones un cuadro liso, como el de color azul ultramarino realizado por el artista Yves Klein,-quien incluso solicitó el registro de ese color, llamado por él mismo como International Klein Blue (IKB) en el Instituto Francés de Propiedad Industrial- o porqué consideran arte un enorme pedazo de madera quemada o una hilera de piedras colocadas sobre el piso en salas de famosos museos de arte moderno.
Hay muchas explicaciones, pero la que mas me ha hecho sentido es la de Marcel Duchamp,(1887-1968) pintor, escultor, escritor y ajedrecista francés: "El arte actual atañe principalmente a la inteligencia y a las ideas por encima de la manualidad".
Duchamp, quien junto con Picasso y Matisse es considerado como uno de los tres artistas que ayudaron a definir la revolución de las artes plásticas en las primeras décadas del siglo XX, rechazó el trabajo de muchos artistas tradicionales, definiendo sus obras como "arte retinal" (que solo intenta satisfacer el ojo). Él en cambio, quiso regresar el arte al servicio de la mente.
Otros como Fernando Botero se alinean con los detractores del arte conceptual diciendo que: "El arte ha ido despojándose de expresión, de formas. De arte. Lo que ve uno es un proceso de pérdida que acaba con la pintura. Si Poussin dijo que Caravaggio vino al mundo a destrozar la pintura porque llevó a los lienzos a los campesinos de manos sucias y las vírgenes eran mujeres del pueblo, yo digo que Marcel Duchamp, cuando llevó un urinario a una exposición, hizo lo mismo. Con ese gesto inventó el 'ready made' y la pereza en el arte. Acabó con todo".
Otros afirman que "al arte no hay que buscarle significados, que el arte es arte sin importar la etiqueta", y que las obras a las que se denomina arte contemporáneo son conceptuales porque en todas son las ideas y el discurso el único peso intelectual que poseen.
En este debate cada quien puede pensar lo que quiera, yo en lo personal le doy valor a las obras que conjugan al mismo tiempo el "arte retinal" que satisface mis ojos y el arte conceptual que satisface mi mente, ya que si bien me puede maravillar el realismo y calidad técnica de grandes artistas como los del Siglo de Oro Neerlandés, sus obras no le dejan lugar alguno a la imaginación.
Me emociona mucho más el expresionismo de artistas como Monet o Jackson Pollock, o esculturas como las de Anish Kapoor (Cloud Gate, Chicago) que una pintura costumbrista mostrando por ejemplo a una mujer sirviendo leche (La Lechera de Johannes Vermeer 1658-1660).
No obstante, y en esto radica la dificultad para definir a que darle valor y a que no, coincido con lo que muchos coleccionistas de arte y asiduos visitantes de museos y galerías dicen y están convencidos de que "buena parte del arte contemporáneo es un engaño". "Lo que distingue el arte moderno del arte de otras épocas, es la crítica" Octavio Paz