Tanga o toga

Los símbolos son base para el desarrollo de los conceptos, de las ideas y de sistemas semióticos. Son instrumentos de comunicación, de pensamiento y de autorregulación, expresiones morales o intelectuales, construcciones culturales que dan sentido a la actividad humana. Unos representan valores universales como la paz, el amor o la justicia, otros relacionados al poder o a las naciones y otros a ideas o conceptos más particulares, como podrían ser determinadas religiones, movimientos políticos, ciertas actividades profesionales, y hasta equipos deportivos, empresas y productos comerciales.

Podríamos decir que los humanos somos "animales simbólicos".

El inicio de las campañas para la elección de jueces en México, y una equivocada y denigrante estrategia publicitaria utilizada por una aspirante a jueza penal de la ciudad de Chihuahua, me hicieron pensar acerca de uno de los símbolos que representan a los jueces. Me refiero a la toga. Es prenda emblemática, símbolo de sabiduría, seriedad, solemnidad y profesionalismo que identifica la posición y autoridad de un juez.

Lo anterior viene a colación por las imágenes que la aspirante a jueza penal de varios municipios de Chihuahua, Lourdes Ríos, eligió para promocionar su candidatura en las que aparece en sugestivas poses sexuales, ataviada con negligés transparentes, bikinis, apretadas minifaldas o en tangas mostrando su abultado trasero.

Si se tratara de una campaña publicitaria para promover la venta de servicios sexuales, las fotografías utilizadas podrían servir a esos fines.

Pero como en este caso se trata de elegir a la persona encargada de aplicar la ley, de resolver una controversia que involucra la vida o el patrimonio de personas, de decidir si una persona es culpable o inocente, de encarcelarla o liberarla, los atributos que debería mostrar no son los de su cuerpo, sino los de su intelecto. Lo que debe promocionar no es su trasero, sino sus conocimientos, su sentido de justicia, su profesionalismo. La toga es símbolo de sabiduría. La tanga es símbolo de sexo.

Las imágenes de su campaña se hicieron virales en redes sociales, provocando todo tipo de comentarios. El más irónico y mordaz que vi fue uno que le preguntaba si ¿aceptará "mordidas"? Ella obviamente respondió que no, pero no sé si fue porque no entendió el doble sentido, o porque simplemente quiso decir que no es corrupta. Ese tono de campañas convierte al sistema judicial en una burla y abre la puerta a todo tipo de especulaciones y chacoteo.

La campaña de esta aspirante es una prueba más del error, del despropósito que significa elegir jueces por medio del voto popular, además porque supongo que todos, a la hora de esperar justicia preferiremos estar frente a una juez con toga que con tanga.

Siempre ha habido desconfianza en el sistema judicial mexicano, y no tengo duda de que una reforma a este sistema era más que necesaria, pero este método de elección de jueces solo servirá para aumentarla.

Un artículo publicado el año pasado en The New York Times decía que "un Poder Judicial capturado políticamente, incapaz de proteger los derechos de manera imparcial sería un desastre para la confianza empresarial y la inversión privada, y más inquietante aún podría abrir la puerta al control del Poder Judicial por parte del crimen organizado y socavar los cimientos mismos del Estado de derecho en México".

Nada es perfecto, y la corrupción y el poder pueden echar a perder cualquier sistema electoral o cualquier institución pública o privada. Pero las posibilidades de que esto ocurra se reducen considerablemente cuando los procedimientos y las reglas para acceder a cualquier puesto son más transparentes y se basan en capacidades, conocimientos, experiencia e idoneidad, es decir, en méritos y no en popularidad.

Elegir jueces mediante el voto popular permitirá que personas ineptas, corruptas o que representan intereses obscuros se conviertan en jueces solo por haber tenido más recursos económicos para promoverse, por haber logrado fama por medio de un chistorete, un eslogan pegajoso (como el de la "ministra del pueblo") o por unas fotografías sexualmente provocativas.

Si luego de aparecer en tanga, la aspirante a jueza de Chihuahua dice que en caso de resultar electa no aceptará "mordidas", la pregunta que seguiría sería: ¿y nalgadas?

"Mayoría no es sinónimo de sabiduría".

Yo